El pasado día 10 de octubre, el Real Cuerpo de la Nobleza de Madrid, una corporación nobiliaria cuyo origen se remonta a finales del siglo XVIII y, actualmente, se encuentra bajo la Jefatura Suprema de S.M. el Rey de España, organizó el Jubileo de las Corporaciones Nobiliarias en la Santa Iglesia Catedral Metropolitana de la Almudena.
Consistente en la celebración de una Santa Misa oficiada por el arzobispo de Madrid, el Emmo. y Rvdmo. Sr. D. José Cobo Cano, el acto religioso contó con la presencia de la Infanta Elena, Duquesa de Lugo, y representantes de la Diputación de la Grandeza y
Títulos del Reino, varias órdenes militares, diversas reales maestranzas y numerosas corporaciones nobiliarias.
En representación de la Lugartenencia de España Oriental de la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén acudieron el Ilmo. Sr. D. Alfonso Brandín Clastre, Caballero de la Orden, y la Excma. Sr. Dra. Dña. Concepción Clastre Garrido, Dama Comendadora
de la misma y Vocal del Consejo de la Lugartenencia.
En su homilía, el arzobispo de Madrid reparó en la importancia del Año Jubilar y recordó a los asistentes que “no hay mayor nobleza que la práctica de la virtud”, transmitiéndose ésta no por medio de la sangre, sino “a través del testimonio de una vida ejemplar”, debiéndose apoyar los cristianos en dos pilares fundamentales de la fe católica: la oración y la penitencia.
Tras la celebración del acto religioso, los representantes de cada corporación caballeresca y/o nobiliaria asistieron a una cena organizada en el Palacio de los Duques Gran Meliá, acudiendo a ésta, en representación de la Lugartenencia, el Ilmo. Sr. D.
Alfonso Brandín Clastre y la Excma. Sra. Dra. Dña. Concepción Clastre Garrido.
